Los padres deben ayudar al niño a conciliar el sueño por sí solo, por ejemplo, estableciendo una rutina para irse a dormir que le dé señales de que se acerca la hora de acostarse. El número de llamadas para pedir vasos de leche debe limitarse de antemano.
La evaluación del patrón de sueño puede revelar características fácilmente tratables:
- los padres pueden tener expectativas poco razonables sobre los patrones de sueño de un niño pequeño
- es posible que el niño duerma demasiado durante el día y que los padres deban considerar la posibilidad de llevar al niño a un grupo de juego (tenga en cuenta que una breve siesta a primera hora de la tarde puede mejorar la calidad del sueño nocturno)
- es posible que el niño se acueste a horas erráticas y no haya desarrollado una rutina para acostarse
- el ciclo del sueño puede haberse desplazado; por ejemplo, los padres han dejado que el niño duerma hasta tarde por la mañana y, por lo tanto, el niño no se cansa hasta tarde por la noche.
Si el retraso en el asentamiento no se debe a ninguna de estas causas, las opciones son las siguientes
- intervenciones conductuales
Éstas pueden incluir
- extinción (por ejemplo, acostar al niño despierto, cerrar la puerta y dejar que llore hasta dormirse)
- extinción modificada (por ejemplo, acostar al niño despierto, salir de la habitación y volver para ver cómo está a intervalos determinados, transmitiendo al niño el mensaje de que tiene que dormirse y tranquilizándole al mismo tiempo diciéndole que no se le ha abandonado)
- Extinción con la presencia de los padres (por ejemplo, cuando se acuesta al niño despierto y los padres se sientan en una silla en la habitación de espaldas al niño sin acercarse a él para tranquilizarlo).
- acostar al niño más tarde de lo habitual con rutinas positivas (por ejemplo, acostar al niño más tarde de lo habitual con rutinas positivas)
- Despertares programados (por ejemplo, se despierta al niño a intervalos fijos para adelantarse a sus propios patrones de despertar).
Aunque en general todas resultan eficaces, no hay pruebas suficientes para recomendar una intervención sobre otra. (1)
si tu hijo no se duerme sin ti, las técnicas que se describen a continuación pueden ayudar a los niños pequeños (de más de 12 meses) o mayores a acostumbrarse a dormirse sin ti en la habitación. También puedes utilizarlas cuando tu hijo se despierte en mitad de la noche, pero prepárate para que tarde mucho en calmarse cuando empieces. Si tu hijo duerme en una cuna y no puedes alcanzarlo para darle un beso, puedes utilizar caricias o palmadas en lugar de besos.
- Sigue una rutina regular para calmarlo antes de acostarlo.
- Acuéstalo cuando esté somnoliento pero despierto y dale un beso de buenas noches.
- Prométele que volverás dentro de unos momentos para darle otro beso.
- Vuelve casi inmediatamente para darle otro beso.
- Dar unos pasos hacia la puerta y volver inmediatamente para darle un beso.
- Promete volver en unos instantes para darle otro beso.
- Guarda algo o haz algo en la habitación y dale un beso.
- Mientras el niño permanezca en la cama, vuelve a darle más besos.
- Haz algo fuera de su habitación y vuelve a darle besos.
- Si el niño se levanta de la cama, dile: "Vuelve a la cama y te daré un beso".
- Vuelve a menudo a darle besos hasta que se duerma.
- Repítelo cada vez que tu hijo se despierte por la noche.
- más consejos para dormir a los menores de 5 años
- Asegúrate de que tienes una rutina de sueño tranquila y predecible, que se repite a la misma hora e incluye las mismas cosas cada noche.
- Si tu hijo se queja de hambre por la noche, dale un tazón de cereales con leche antes de acostarse (cepíllale los dientes después).
- Si su hijo tiene miedo a la oscuridad, considere la posibilidad de utilizar una luz nocturna o dejar encendida una luz de descansillo.
- No dejes que tu hijo mire el portátil, la tableta o el teléfono entre 30 y 60 minutos antes de acostarse: la luz de las pantallas puede interferir en su sueño.
- Si su hijo se despierta durante la noche, sea lo más aburrido posible: deje las luces apagadas, evite el contacto visual y no le hable más de lo necesario.
- Evite las siestas largas por la tarde.
- tratamiento farmacológico
- la melatonina mejora el sueño en niños con TEA (2)
- la administración de melatonina puede utilizarse para adelantar el inicio del sueño a valores normales en niños con TDAH que no toman medicación estimulante (2)
- con respecto al uso a corto plazo de antihistamínicos sedantes en el insomnio infantil, los efectos secundarios sedantes de los antihistamínicos pueden acelerar los programas conductuales durante periodos cortos, pero no parecen funcionar sin intervenciones conductuales
- en un ensayo doble ciego controlado con placebo en lactantes de 6 a 27 meses con el uso de tartrato de trimeprazina (3) los autores concluyeron que no se recomienda como tratamiento farmacológico para los trastornos del sueño infantil a menos que se utilice como complemento de un programa de terapia conductual
- clínicamente, el uso a corto plazo de un bloqueante H1 para el insomnio transitorio o extremo se emplea con frecuencia: sin embargo, la tolerancia puede desarrollarse rápidamente y algunos niños pueden experimentar una sobreexcitación dramática y paradójica.
Referencias:
- Macias MI, Malhotra S. Insomnio conductual de la infancia. Am J Respir Crit Care Med. 2021 Abr 15;203(8):P20-P21.
- Bruni O et al. Revista Europea de Pediatría. European expert guidance on management of sleep onset insomnia and melatonin use in typically developing children. Volumen 183, páginas 2955-2964, (abril 2024)
- France KG, Blampied NM and Wilkinson P .A multiple-baseline, double-blind evaluation of the effects of trimeprazine tartrate on infant sleep disturbance. Exp Clin Psychopharmacol 1999; 7: 502-513.